Entre el mar y la montaña se encuentra Almuñécar, una de las ciudades más antiguas del Mediterráneo cuyas tradiciones, herencia arqueológica y monumental, clima y privilegiado entorno natural han convertido. a este lugar en un importante núcleo turístico. No es vano su litoral es conocido con la marca de Costa Tropical.
RINCONES IMPERDIBLES
Disfrutar de las playas
Son más de 20 kilómetros de costa los que hay desde la Playa Cantarriján, en La Herradura, hasta el extremo oriental de Almuñécar.
Peñón del Santo
El Peñón del Santo, lugar emblemático de Almuñécar, es un saliente rocoso que se alza sobre el mar a este lado del Mediterráneo. Desde aquí tenemos acceso a unas vistas espectaculares del Casco Antiguo y el litoral.
En el año 1963 fue hallada aquí la Necrópolis Fenicia Laurita, el vestigio fenicio-púnico más antiguo encontrado en la provincia de Granada. Su interior custodiaba la urna de cremación del faraón Apofis Ida entre 1500 y 1600 a. C.
El Jardín Botánico
A los pies del Castillo están Los jardines de Majuelo que hace las veces de jardín botánico.
Caminamos entre palmeras y árboles exóticos procedentes de distintas partes del mundo y entre los cuales han sido colocadas esculturas de artistas locales.
Los diferentes caminos que transcurren por el parque pasan por las denominadas "Casas de la Provincia" en alguna de las cuales nos encontramos con artesanos trabajando.
Fábrica de Salazón de Pescado
El corazón de los jardines alberga la antigua Fábrica de Salazón de pescado que data de la época fenicia y que más tarde fue utilizada por los romanos para elaborar una salsa de pescado muy popular que después exportaban a todo el Imperio.
Durante todo el año se utiliza el parque como escenario para celebrar los diferentes festivales de la ciudad además de su popular feria gastronómica.
Acueducto romano
Construido en el siglo I d. C entre los ríos Verde y Seco, contaba con una longitud de 7 kilómetros; se conservan de él 5 tramos.
El acueducto fue declarado Bien de Interés Cultural y algunos de sus tramos aún son utilizados hoy en día para el regadío tradicional. Se llega hasta él desde la carretera que lleva a Suspiro del Moro.
Parroquia de la Encarnación
Loa cimientos de esta iglesia ubicada en pleno casco histórico, han sido levantados sobre un depósito de agua romano desde donde salían los canales de distribución. Para ello se aprovecharon los materiales de una antigua mezquita árabe que fue tomada por los cristianos durante la reconquista en 1489.
El templo fue edificado por Ambrosio de Vico entre 1570 y 1600 siguiendo el proyecto arquitectónico de Juan de la Herrera, arquitecto del rey Felipe II. Su interés e importancia radica en que se trata de la primera iglesia que se construye en la provincia de Granada de estilo protobarroco.
De su planta rectangular casi perfecta sobresale ligeramente la torre rematada con una cruz de hierro. Como hicieran en otras iglesias de la zona, la cubierta carece de tejado dejando las bóvedas traspasadas para servir de fortaleza en caso de ataque por el mar.
Dentro se custodia la Virgen de la Antigua, patrona de la localidad.
Castillo de San Miguel
Situado en el cerro que lleva su mismo nombre este castillo se ubica en el mismo lugar donde los fenicios habían levantado un fuerte en el siglo VII a. C. La mayor parte de la estructura actual pertenece a la época árabe de los siglos VIII al XV d. C. y la dinastía nazarí lo utilizó como lugar de recreo en el siglo XIII.
Según entramos, a nuestra izquierda veremos que una de las torretas está inclinada. Esto es debido a que, durante la Guerra de la Independencia que enfrenta a España y Francia fue derribada en un bombardeo desde el mar por los buques de guerra ingleses.
Más adelante, hasta mediados del siglo XIX, fue utilizado como cementerio cristiano.
En la actualidad alberga el Museo de la Historia de Almuñécar.
Cueva de los siete palacios
En el cerro de San Miguel se encuentra esta cavidad subterránea conformada por una gran bóveda de piedra junto a otras siete de menor tamaño. Se trata de un antiguo templo que los romanos levantaron en honor a Minerva.
Actualmente alberga el Museo Arqueológico municipal y la cueva ha sido catalogada como Bien de Interés Cultural por su gran valor arqueológico, histórico, arquitectónico y de cualificación ambiental y paisajística de la ciudad.
Nos encontramos a orillas del Mediterráneo en la ciudad que vio nacer a Pablo Picasso o Antonio Banderas, entre otros conocidos personajes. Aquí nos esperan un mar de playas, 16 nada menos; un ambiente cultural que se refleja en los muchos museos para todos los gustos y un patrimonio cultural fruto de siglos de historia.
Y es que la esencia de esta apasionante ciudad te atrapa cuando te sumerges en los sabores tradicionales de la tierra o paseas entre flores por la calle Marqués de Larios.
Málaga es también su Festival de Cine, la Semana Santa, sus innovadores restaurantes... y sobretodo, Málaga es alegría.
Un poco de historia
Para buscar los orígenes de Málaga tenemos que remontarnos al siglo VIII a. C cuando cerca del cerro donde hoy se encuentra la Alcazaba, los fenicios levantaron un pequeño poblado.
Su etapa de mayor esplendor tiene lugar con el dominio musulmán a finales de la Edad Media, período que coincide con la construcción de numerosas mezquitas, las Atarazanas y la Alcazaba. Destaca la producción de pasas, frutos secos y loza de reflejos dorados.
Tras la conquista del territorio por los Reyes Católicos en 1487, la ciudad es repoblada con cristianos venidos del valle del Guadalquivir. Las parroquias ocupan los espacios de las antiguas mezquitas, se fundan numerosos conventos y dan comienzo las obras de la Catedral.
El siglo XIX es la etapa industrial que traerá consigo un desarrollo económico favorecido especialmente por las fábricas siderúrgicas y textiles.
En la actualidad, Málaga apuesta por un turismo cultural como ciudad de museos tras hacer de la Costa del Sol uno de los destinos vacacionales preferidos.
Rincones imperdibles
Tribuna de los Pobres
Aunque a simple vista no es más que una escalinata separada en tres tramos, esta estructura es mucho más que el acceso peatonal entre la calle Mármoles y la margen izquierda del Guadalmedina y la calle Carretería.
La Tribuna de los Pobres es todo un símbolo dentro de la Semana Santa malagueña. Su nombre está estrechamente vinculado al hecho de que tradicionalmente fuera el punto elegido por los más desfavorecidos para contemplar el paso de las procesiones.
Iglesia del Sagrado Corazón
Caminamos rumbo a la Plaza de San Ignacio de Loyola para ver la única obra neogótica del casco antiguo de Málaga. Al encontrarse enclavada en una estrecha calle, se produce un efecto óptico que hace ver el templo de mayor tamaño al que en realidad tiene.
La iglesia fue mandada construir por los jesuitas un unos terrenos que habían sido donados por Carmen Morales Puya y el proyecto es obra del arquitecto local Fernando Guerrero Strachan. Este tomó como modelo las catedrales de Toledo y Burgos, además del monasterio de las Huelgas y, con el objetivo de hacerla más hispánica, introdujo elementos islámicos.
Son clave en este templo las vidrieras que permiten iluminar su interior, y el crucero, coronado por una bóveda octogonal estrellada. La capilla mayor está presidida por un retablo neogótico obra del escultor malagueño Adrián Risueño y en él sobresale la monumental escultura del Sagrado Corazón de Jesús.
Plaza de la Constitución
El espacio público y político de Málaga por excelencia de la vida malagueña es La Plaza Mayor o de las Cuatro Calles como la llamaron los nazaríes hasta que en 1812 pasó a llamarse de la Constitución.
Esta plaza adquiere su planta casi definitiva en la primera mitad del siglo XVI y en ella estuvo la Casa capitular hasta 1869; también albergó otros edificios como la Casa de Corregidor, la cárcel, la Audiencia y el Colegio de los Jesuitas.
Para no obstaculizar con su presencia la celebración de los espectáculos públicos que se vienen desarrollando en este emplazamiento, en uno de sus laterales próximo a la salida hacia la Calle Especería, se colocó la Fuente de Génova o Fuente de Carlos V. Se trata de una fuente anónima de estilo renacentista que data del siglo XVI
Calle Marqués de Larios
Salimos de la Plaza de la Constitución por la calle Larios, eje comercial de la ciudad y cuyo valor arquitectónico y urbano hacen que sea considerada como una de las calles decimonónicas más elegantes de España.
En la intersección con la Alameda Principal preside el inicio de la calle un conjunto escultórico en honor a Manuel Domingo Larios Larios, II Marqués de Larios que da nombre a la calle.
Destacan los edificios proyectados por Eduardo Strachan con un diseño curvo en las esquinas buscando el equilibrio en las formas y la simetría, y que estaba inspirado en las tendencias arquitectónicas de Chicago.
Catedral de la Encarnación
Estamos ante una de las joyas del Renacimiento español cuya historia comienza en la mezquita Mayor emplazada en el interior del recinto amurallado y sobre la cual fue levantada. El fruto de las distintas etapas y estilos que influyeron en este templo dedicado a la Encarnación, es una majestuosa catedral renacentista-barroca con vocación gótica.
Su origen se sitúa en 1487 cuando Málaga es conquistada por las tropas castellanas. Siglos después, se trata de una obra inacabada a la que falta el remate de la fachada principal y completar la torre sur, de ahí que popularmente se la denomine "La Manquita".
Su fachada presenta una compleja y elaborada composición barroca con dos torres que flanquean el cuerpo central con dos pisos y tres calles divididas por columnas. Cada una de las caras de la Catedral tiene su puerta, la Puerta de las Cadenas al norte, y la Puerta del Sol, al sur.
Su interior es de planta rectangular y está compuesto por tres naves con capillas laterales en todo el perímetro. En él destacan el Altar Mayor, obra de Diego Vergara de 1541, y el Coro, una de las estancias más valiosas de la catedral.
Museo Picasso
El que fuera Palacio de los Condes de Buenavista, de 1530, acoge en la actualidad el Museo Picasso tras su reconversión e inauguración, en 2003. Se trata de un edificio renacentista con elementos mudéjares y situado en pleno casco histórico de la ciudad. En el subsuelo del palacio hay un yacimiento arqueológico del siglo VII a. C. que muestra el origen fenicio de la ciudad y vestigios de la época romana.
Pese a que los lienzos de Picasso son expuestos en los museos más importantes del mundo, en este espacio se pueden ver algunas de las obras más famosas del artista donadas por este a la ciudad en la que pasó los primeros 10 años de vida y a la que regresó en varias ocasiones. Se trata del único museo Picasso en el mundo que reúne todas las etapas del artista y además, completa las ofertas de las otras pinacotecas sobre el artista en el mundo: París, Barcelona y Antibes.
La siesta, Acróbata, Mujer con brazos levantados, Bañistas, Las tres gracias o Jacqueline sentada, son algunos de los cuadros más destacados. La mayoría hacen referencia a sus vivencias en París y a su forma de entender la realidad.
Teatro romano
Este teatro estuvo durante muchos años semioculto por el edificio de la Casa de la Cultura que al ser reformado en los años sesenta deja al descubierto los primeros indicios de esta construcción.
Se sabe que fue levantado en tiempos de Augusto, en el siglo I d. C y se mantuvo en uso dos siglos más. Fue construido junto al puerto y a los pies de la colina aprovechando parte de la ladera, Las excavaciones efectuadas sacaron a la luz el escenario, restos de la Orchestra, el graderío con 13 gradas y el vomitorum o entrada a las gradas.
Pirámide de Cristal
Junto al Teatro Romano, en la Calle Alcazabilla, nos encontramos con esta pirámide de tres metros de altura que imita la pirámide del Louvre y nos permite ver los restos arqueológicos hallados en el subsuelo de la vía.
Torre del Homenaje
Dominando el perfil de la Alcazaba desde el mar se alza esta torre de grandes dimensiones y planta cuadrada de la que solo quedan sus ruinas pero que mantiene su ventana original abierta al cielo.
Alcazaba
En tan solo unos metros nos encontramos a la cultura romana, árabe y renacentista compartiendo un rincón a los pies del monte Gibralfaro donde la Alcazaba, el Teatro romano y el edificio de la Aduana resisten de la mano el paso del tiempo. En la cumbre, el Castillo vigila unido a la Alcazaba por un pasillo protegido entre dos zigzagueantes murallas llamado Coracha.
Pasarela mirador de la Alcazaba
Para llegar hasta esta pasarela que nos hará disfrutar de las impresionantes vistas del Centro de Málaga y del antiguo Teatro Romano, hay dos accesos, uno desde la Calle Cilla y otro desde la Calle Mundo Nuevo.
Se trata de una estructura realizada con elementos de acero corten que se distribuye por la pasarela a través de rampas y escaleras.
Mirador de Gibralfaro
Para poder contemplar la ciudad en todo su esplendor no espera este mirador situado a 130 metros de altura sobre el monte Gibralfaro y junto a la Alcazaba. Tras una larga caminata por el Paseo de Don Juan Temboury que nos llevó hasta allí, no se me ocurre mejor recompensa.
Castillo de Gibralfaro
En la cima del monte que lleva su nombre se encuentra este castillo construido por mandato de Yusuf I en 1340 a. C. con el objetivo de mejorar la defensa de Málaga.
Además del castillo, Yusuf ordenó también construir una "Coracha" o especie de pasillo amurallado que comunicaba la Alcazaba con el Castillo y por donde los soldados podían trasladarse con con total seguridad.
En el año 1487, Alcazaba y Castillo se convirtieron en protagonistas cuando los cristianos llegan a la ciudad con un ejército de 70.000 soldados dispuestos a reconquistar el territorio.
Ayuntamiento
Conocido como la Casona del Parque, este edificio se localiza en el Paseo del Parque, rodeado por los Jardines de Puerto Oscura y otros distinguidos edificios de Málaga.
Fue construido por los arquitectos Manuel Rivera y Fernando Guerrero Strachan en un claro estilo neobarroco con detalles modernistas.
Fuente de las Tres Gracias
La Fuente de las Tres Gracias o Fuente de las Tres Ninfas, es obra del ingeniero José María Sánchez. Construida en hierro fundido, consta de tres cuerpos y dos tazas en los que destacan las tres figuras femeninas talladas en mármol.
Centro Pompidou
Ubicado en el espacio denominado El Cubo, se trata de una sede del Centro Nacional de Arte y Cultura Georges Pompidou de Francia.
Aunque inicialmente se instala por cinco años, fue tal el éxito cosechado, que la colaboración firmada con la ciudad de Málaga fue renovada por cinco años más. En él se pueden apreciar varias decenas de obras seleccionadas entre la colección del Centre Pompidou que invita a viajar a través del arte por los siglos XX y XXI.
La Farola de Málaga
Nos encontramos en el Paseo de la Farola, en pleno barrio de La Malagueta, ante uno de los faros más antiguos de España. Curiosamente, este faro, junto con la Farola de Tenerife, son los únicos con nombre femenino.
Su edificación se inició durante el reinado de Fernando VII tras finalizar la Guerra de la Independencia y es obra del ingeniero Joaquín María Pery y Guzmán.
Para su construcción se utilizó piedra del Monte Gibralfaro y mano de obra de presidiarios lo que sin duda abarató su coste.
El cubo de Rubick
En uno de los bloques de cemento que protegen el espigón de entrada al puerto deportivo del Club Mediterráneo, este colorido cubo destaca entre toda una paleta de tonos grises.
Germán e Iris Duarte, padre e hija, reivindican la autoría de la llamativa obra. "El objetivo del arte es despertar sensaciones e interpretaciones, nosotros lo hemos aproximado a los ciudadanos" han dicho.
Playa de la Malagueta
¿Quién no ha oído hablar de la Playa de la Malagueta? Esta playa de arena oscura y moderado oleaje, está rodeada por un maravilloso paseo marítimo lleno de palmeras.
Fábrica de Salazón de Pescado
