Situado a los pies de la sierra del Toloño, en la comarca de rioja Alta, la silueta de San Vicente de la Sonsierra asoma imponente según te vas acercando desvelando así la importancia de esta fortaleza durante la Edad Media. Esta sensación crece conforme nos adentramos en sus estrechas calles. Caminamos sintiendo la grandiosidad de sus edificios llenos de contrastes pues algunos se alzan majestuosos y señoriales en su porte con armas de linajes antiguos, mientras que otros se muestran humildes hechos con aparejo de mampostería y adobe.
Partiendo desde la plaza descendemos por la Calle Mayor hasta llegar a la Calle Carnicerías. Una vez allí, por la Puerta de la Primicia, nos adentramos en el recinto amurallado para encontrar los restos de las antiguas edificaciones adosados a las murallas que conservan los vestigios del pasado vitivinícola de la localidad.
Rincones del recinto amurallado:
Parroquia de Santa Maria la Mayor
Este templo de estilo gótico tardío es la parroquia de la localidad y fue levantada en el primer tercio del siglo XVI aprovechando el patio de armas del castillo. Para ello se utilizó piedra de sillería del entorno y la fábrica responde al estilo empleado en las construcciones de la zona.
La torre de caras asimétricas constituye el punto más alto de la zona lo que confiere un característico perfil a San Vicente de la Sonsierra que llama la atención especialmente desde la carretera.
En el año 1933 fue declarada Monumento Nacional.
Torre del Reloj
La Torre del reloj se sitúa al este de la explanada donde se encuentran la iglesia de Santa Maria la Mayor y la ermita de San Juan. En esta torre se colocó un reloj público cuyo mecanismo original se mantiene hoy en día.
Restos del Castillo
Muchos han sido los intentos para recuperar y restaurar este castillo-fortaleza que en su día fue la construcción de carácter defensivo con más envergadura de Navarra.
Fue construido por mandato de Sancho el Sabio de Navarra hacia el año 1172 y las obras corrieron a cargo de Ferrant Moro. Su privilegiada situación en lo alto del cerro que domina el Ebro y la solidez de sus muros hicieron de esta fortaleza un lugar inexpugnable.
En 1512 perdió todo su interés militar y, a partir de 1898 con el derrumbe de parte de las murallas y el uso de su piedra para la construcción, hicieron que el conjunto se fuera demoliendo progresivamente.
Torre del Homenaje
La torre del Homenaje, llamada Torre Mayor, fue en su origen una torre vigía y la primera construcción del conjunto que data del 11270.
Su planta rectangular contaba con al menos tres plantas realizadas en forjado de madera y, en el siglo XIX, fue dotada de una nueva cubierta, nuevos forjados y una escalera interior de madera. El color rojizo que presenta la parte baja se cree que responde a la acción de algún incendio acaecido en el lugar.
Murales de San Vicente de la Sonsierra
Mural del Conjunto Arqueológico de Santa Maria de la Piscina
Este mural fue realizado por el artista riojano José Urízar de Alcada Leiva en el año 2017. Está formado por la Basílica románica de Santa Maria de la Piscina (siglo XII), una necrópolis de repoblación (siglos X al XIV), un poblado con viviendas semirrupestres y restos de fortificaciones o atalayas (siglos X al XIV).
Mural del Guardavías de Larrá
Este mural fue realizado en 2017 por el mismo autor y representa el Chozo o Guardaviñas de La Rá.
Los Chozos se asemejan a un enorme iglú de piedra y se utilizaban para dar cobijo a los trabajadores durante la jornada y, a veces, días.
Mural los Disciplinantes
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